El pasado 13 de marzo la UNESCO reconoció de manera oficial la escena techno de Berlín como parte del patrimonio inmaterial de Alemania

La designación de la UNESCO como patrimonio cultural inmaterial abarca expresiones culturales como música, danza, teatro, prácticas, rituales y habilidades que se transmiten a lo largo de generaciones. El anuncio de la incorporación de la escena techno berlinesa, confirma el estatus mundialmente reconocido de la vibrante escena techno de Berlín, a pesar de los desafíos actuales que enfrenta como resultado de la pandemia de COVID-19.

Lutz Leichsenring, miembro de la junta directiva de la ClubCommission de Berlín, ha elogiado este reconocimiento como una gran victoria para la comunidad techno de la ciudad, destacando la necesidad de proteger y apoyar la cultura de club en Berlín. Tanto la comisaria federal de Cultura y Medios de Comunicación, Claudia Roth, como el vicepresidente de la Comisión Alemana para la UNESCO, Christoph Wulf, han enfatizado que las subculturas contribuyen significativamente a la riqueza cultural de la nación y fomentan la cohesión social.

“Durante más de treinta años, el techno ha sido un sonido importante de nuestra capital, también para muchas personas de Europa y de todo el mundo que vienen a Berlín. La cultura techno de Berlín ha representado valores como la diversidad, el respeto y la apertura durante muchos años.”

Claudia Roth, miembro del Bundestag y Ministra de Estado de Cultura y Medios.

Este reconocimiento y apoyo por parte de los políticos simbolizan un cambio en la percepción de la cultura de la música electrónica, acercándola un paso más hacia el objetivo de igualdad con otras formas establecidas de cultura.

La decisión de la UNESCO de incluir el techno de Berlín como patrimonio cultural inmaterial llega después de una campaña liderada por DJs, organizadores de festivales y seguidores para asegurar la continuidad de esta escena en la capital alemana.

Todo comenzó en la ‘Kunsthaus Tacheles’ de Berlín, una galería de arte moderno gida por un colectivo de artistas que ocuparon la propiedad desde 1990. Allí se estableció, en 2011, una asociación sin fines de lucro que acabó proponiendo la inclusión del techno como Patrimonio Cultural Inmaterial. Aunque la asociación se disolvió con el cierre de la galería, la idea fue revivida con la creación de Rave The Planet, una organización sin fines de lucro con sede en Berlín dedicada al arte, la cultura y la promoción de la música electrónica

En 2018, comenzaron los preparativos para la solicitud a la UNESCO, con un grupo de trabajo dirigido por dicha organización. Durante casi dos años, el grupo investigó la cultura techno de Berlín y colaboró en la producción del documental “Techno Culture in Berlin // Film on the UNESCO Intangible Cultural Heritage Application” con 25films.

Todo el proceso hasta el reconocimiento duró aproximadamente 13 años, pero una vez más demuestra que una gran visión puede convertirse en realidad mediante una convicción firme, trabajo duro, perseverancia y colaboración entre muchas personas. Rave The Planet, por su parte, nada más conocer esta maravillosa noticia, utilizó sus redes sociales para celebrar este logro y agradecer a todos los involucrados en la iniciativa.

Esta campaña, cuyo objetivo era presionar a las autoridades alemanas para que reconocieran el techno de Berlín como patrimonio cultural inmaterial, tuvo un merecido final feliz. Especialmente después del cierre de aproximadamente 100 locales en la ciudad durante la última década. Este reconocimiento resalta la relevancia de la comunidad techno en la ciudad de Berlín y la urgencia de respaldar la cultura de los clubes.