Una de las salas mas míticas de toda Europa, cerró un triste fin de semana de agosto tras la muerte de dos adolescentes por una sobredosis. El mundo de la música electrónica se tiñó de negro; una de las salas estandartes del techno, house, breakbeat, dubstep y drum & bass cerraba sus puertas.
Se iniciaron campañas por distintas redes sociales; cientos de djs trataron de revivir a una sala que, aparentemente, estaba muerta.
Afortunadamente, el gobierno londinense ha tomado cartas en el asunto, y tras crear una serie de normas estrictas con respecto a la sala y su funcionamiento, ha decidido aceptar la re-apertura de uno de los clubs más legendarios de Europa.
Se instalará un servicio de cámaras de vigilancia en la sala, no se permitirá la entrada a menores de 19 años y se prohibirá la entrada de por vida a Fabric a toda persona que se vea vinculada con las drogas en dicho club. Estas medidas nos parecen un auténtico acierto, ya que estamos cansados de que se vincule la música electrónica con las drogas. Si de verdad quieres disfrutar un show, una actuación, lo que menos necesitas es un estupefaciente.
Toda norma que separe este tipo de drogas con la música electrónicas es bienvenida. Lo que realmente importa es que uno de los templos más importantes de Europa a nivel musical vuelve a abrir sus puertas, al menos a nivel oficial; ya que se estaban realizando algunas fiestas ilegales a puerta cerrada al más puro estilo underground.
Desde Loud Cave deseamos lo mejor para esta nueva etapa de Fabric. Estamos seguros de que el club seguirá creando momentos musicales inolvidables.