El artista colombiano sigue renovándose para lanzar su sexto álbum de estudio con el sonido y la imagen más frescos del momento.

Son ya más de 10 años los que lleva J Balvin regalándonos música. Desde su primer disco de oro con su álbum debut “Real” hasta el “Vibras” que no paró de sonar en 2018, J Balvin ha ido adaptando su sonido a los distintos tiempos. Pasa igual con sus shows y videoclips, siempre ligados a la originalidad y a la sorpresa.

En este nuevo álbum “Colores”, el concepto es muy sencillo: Cada uno de los 10 temas está titulado con el nombre de un color y expresa algo distinto. Cada color es un mood diferente. Algo a resaltar sobre el arte de este álbum es que J Balvin se ha asociado con el famoso artista japonés Takashi Murakami, siendo la primera colaboración de un artista urbano y latino con este prestigioso artista. Esta colaboración está presente a lo largo de toda la línea de diseño del álbum, como con las conocidas flores del japonés unidas a los ojos en forma de rayo de J Balvin, presentes en todas las caratulas.

El concepto de los colores también se ha aplicado a los videoclips. Por ahora hemos podido ver los de “Blanco”, “Morado”, “Rojo” y “Amarillo”, y en todos predomina el color de cada canción en la vestimenta de los actores, en el escenario, etc. Una idea sencilla y a la vez muy original.

Pasando ya a lo estrictamente musical, el álbum está completamente enfocado al reggaeton. Dentro de este género escuchamos distintos estilos, pero no encontramos por ejemplo ninguna canción de trap como si hemos escuchado de Balvin fuera de este disco.

Empezando por la primera, “Amarillo”, escuchamos un tema muy bailable que incluso da lugar fácilmente a coreografías por su ritmo, como vemos en alguna parte del videoclip. Un ritmo muy fresco e innovador, producido por DJ Snake, Afro Bros y Sky Rompiendo -productor de la mayoría de temas- hace gran parte de este tema, en conjunto con la pegadiza letra. En cuanto al videoclip, sin duda uno de los mejores que hemos visto hasta ahora de este álbum.

Como decíamos, cada tema representa una sensación distinta y, en el caso de “Azul”, cambiamos bastante de tercio respecto al anterior. Cuenta con la ayuda en la composición de Justin Quiles, al igual que otros dos temas del disco. En él ese mood cambia a un ambiente más veraniego y desenfadado. Uno de los tracks que más está gustando hasta el momento.

Hablando del ya estrenado anteriormente “Rojo”, hablamos del que es probablemente el tema más melancólico, romántico y melódico del álbum. Tanto el tema como el videoclip nos cuentan una historia triste o feliz -según desde el punto en el que se mire- y J Balvin saca su voz más trabajada para crear esa atmósfera.

“Rosa” nos presenta un reggaeton más lento, en este caso producido por el omnipresente Diplo. Según Balvin en este tema habla sobre “cuando no puedes decirle a una mujer lo mucho que le quieres y no sabes qué hacer cuando estas delante de ella”. Sin duda la producción de Diplo juega un papel muy importante en el tema.

Como quinto tema tenemos el ya completo éxito “Morado”, que cuenta con mas de 120 millones de reproducciones en Spotify. Con este tenemos un reggaeton más usual y a la vez muy bueno. Estamos seguros de que éste ya lo habéis bailado más de una vez en las discotecas.

“Verde” nos trae una grata sorpresa, ya que es una de las dos únicas colaboraciones como tal que encontramos en el álbum. Es ni más ni menos que con Sky Rompiendo, que sale de la mesa de mezclas para entrar en las vocales. Un tema puro reggaeton que nos ha gustado bastante.

Con “Negro” tenemos una canción de reggaeton de malianteo y que personalmente pensamos que es de las mejores. Según el propio Balvin, este tema le recuerda a la época de Héctor El Father. Lo cierto es que el color negro le queda perfecto a este tema.

“Gris” es algo completamente distinto a la anterior, puesto que escuchamos un tema más ligero y menos reggaetonero. Un tema más instrumental, a base de guitarra y percusiones poco marcadas. Nos recuerda en cierta manera a “Indeciso” del propio J Balvin con Reik y Lalo Ebratt, salvando las distancias.

El único tema que no tiene un único color es “Arcoíris”, como es lógico. Es la segunda y última colaboración del álbum, esta vez con Mr Eazi. J Balvin dijo que la titularon así por lo mucho que cambia de ritmo. Una combinación de ritmos africanos y latinos que comparte rasgos con la anterior colaboración de ambos y Bad Bunny en “COMO UN BEBÉ”. Puede que este tema no cale tanto como el resto, pero tiene un buen proceso detrás.

Para terminar tenemos “Blanco”, el primer tema que pudimos escuchar de este “Colores”. Algo bastante diferente ya no solo al resto del álbum, sino a la mayoría de temas de la escena urbana latina. Un tema dedicado a su ciudad Medellín que ha sido un completo éxito desde su salida.

La originalidad en el concepto de este álbum otorga a “Colores” algo especial desde el primer momento. Su producción sin duda es de primerísimo nivel y en general todos los temas tienen algo que gusta. Muy pocas colaboraciones, full J Balvin, Un paso más de este artista en su camino hacia la inmortalidad como artista urbano. ¿Con qué colores os quedáis vosotros, cavernícolas?