Samuraï es Aroa Lorente, una de las artistas con proyección pop y ambición rockera dispuesta a renovar el paradigma musical actual. Desentendida de clichés sobre su música, cierra una etapa sobre desamor y rupturas con su último single ‘Palabra Prohibida’. Hablamos con ella!
Loud Cave: Tu ascenso desde fuera puede parecer como algo meteórico, pero en verdad siempre hay mucho trabajo detrás. ¿Cómo estás siendo este viaje para ti estos años estos últimos dos años?
Samuraï: La gente me dice “bua estás yendo súper rápido” y yo digo en realidad no, una de las cosas más importantes para mí es tener un crecimiento orgánico y a mi ritmo. Si de repente hay muchos lanzamientos o conciertos, momentos en que todo va más rápido, es porque la vida lo ha querido así, pero creo que voy a un ritmo bastante despacito y a gusto.
LC: ¿Entonces no ha sido abrumador para ti?
S: Qué va, genial.
LC:Leí una entrevista que decías que hacías pop rock pero que te gustaría acabar haciendo el rock más orgánico posible. ¿Estás en ese camino ahora?
S: Sí, totalmente, o sea justo ahora he sacado una balada que en el fondo y en mi opinión es una cosa que todas las grandes bandas y grupos de rock también tienen. Si que estoy un poco como que cada día hago una cosa, pero intento que todo tenga mi sonido y si me preguntas, sigo pensando en que yo quiero hacer rock.
LC:Justo te iba a decir que cada vez que leía tu nombre había una etiqueta diferente. Urban, pop urbano, pop con electrónica, pop rock….¿Cómo te sientan esas etiquetas?
S: No me gustan porque yo hago música, punto. O sea que si la gente tiene la necesidad de ponerle etiquetas, pues como en las relaciones, no me molestan pero tampoco me siento identificada.
LC:Lanzaste ‘Palabra prohibida’ que es lo que has dicho, una balada mucho más acústica y orgánica, muy íntima porque el tema lo requiere. ¿Cómo te decides en el enfoque de la producción de cada canción?
S: Cada canción es un mundo, al final hay canciones mucho más punky, mucho más agresivas y ‘Palabra prohibida’ es una canción que dejé tal cual la maqueta que grabé antes de la versión oficial. Grabé voces y grabé todas las guitarras bien y todo y aún así, dejé el original porque lo grabé llorando en mi cuarto y me parecía eso mucho más puro. Entonces siento que eso te lo dice la canción y también con los productores lo ves, es más una decisión que tomé yo sola pero es algo que te pide el tema.
LC:De productores también quería hablar, porque se habla mucho sobre todo en el urbano, pero cuando hablas con gente de pop no se suele comentar. ¿Cómo es tu trabajo con los productores?
S: Pues a ver yo tengo a mi productor de del alma que es D3llano qué es la persona con la que yo empecé a sacar música, al final es como mi hermano, tenemos ya una conexión que nos entendemos muy bien. El sabe cómo soy, yo sé cómo es él y algo muy importante en la conexión entre el productor y artista es es hacerse crecer el uno al otro. Que yo saque a lucir lo que tiene Pablo y que él saque lucir lo que tengo yo. Para mí eso es como lo más importante, ahora estoy trabajando con Paco Salazar en todo el nuevo proyecto pero no dejo de trabajar con Pablo. Me parece súper importante conectar con productores, mantener como es que al final ese es un 50% de la canción, aunque yo por ejemplo meto mano en la producción, pero es importante escoger una figura que te sientas cómoda y que te escojan a ti también.
LC:Enhorabuena sold out en Madrid el día 16 de diciembre y luego otra tienes otra fecha en menos de dos meses también aquí. ¿Cómo sienta estar tan arropada en la ciudad que creciste?
S: Es increíble porque es que hace un año hicimos la clamores que son 250 personas y rascando con mis colegas. Yo siempre he dicho que quiero ser una artista de directo, o sea yo quiero que se me conozca por mis directos y que la gente quiera venir a mis directos y llenar todas las salas. Me da igual tener menos oyentes mensuales, que al principio pasa que yo tenía muchos oyentes mensuales pero luego a la hora de las ventas es más difícil, pero es que este año no, está súper equilibrado. Estamos a punto de hacer sold out en la 8 y medio, hemos llenado 2500 personas a Madrid y el año pasado hicimos 250 y ni siquiera, que de esas 250 que 100 eran mis colegas sabes… Es increíble
LC: A ti te gusta mucho el directo y has hecho festivales. ¿Qué te gusta más?
S: Es que no me parece comparable, es como peras y manzanas porque los festivales tienes la adrenalina de que te ven 20000 personas y es increíble, te das a conocer y de ahí siempre te llevas de 1 a 100 personas nuevas contigo. La gira de salas es como un monólogo en plan porque yo hablo mucho, de hecho tengo limitado el tiempo en el que hablo con solo un hueco para hablar en todo el bolo (risas). Pero lo mejor de las salas es que es íntimo, sí que este año las salas son más grandes y la vibra es un poco distinta, pero aún así ponle que hay como 300 personas… Tú ves la cara de esas 300 personas, les podrías poner el nombre e intentar acordarte de todas. Es un tú a tú, ¿sabes? Es un contacto directo de personas que te admiran, personas que se lloran todas sus canciones, que desean estar ahí… Son conceptos que no me parecen comparables un festival y una sala.
LC: Bueno se acabó tu etapa más Call of Duty, ¿ahora cuál viene?
S: Pues ahora estoy preparando proyectos grandes, viene una época en la que ganará el buen rollo porque vengo de hablar de todas las cosas tóxicas que me han pasado y de hablar de amor y desamor ya no estoy ahí. De hecho ‘Palabra Prohibida‘ fue para mí una manera de decir aquí se cierra el capítulo de la toxicidad y el amor porque ya está bien. No me viene bien al menos a mí y a mi salud mental… Yo necesitaba también vivir más cosas, al final escribimos sobre nuestra vidas y ya estaba removiendo cosas que yo ya no podía remover más. Y me pregunté “¿Ahora yo en realidad cómo estoy?”… Y estoy bien, feliz con mis amigos y con la música, entonces ahora viene una etapa de diversión y rock and roll.
