Roland añade a su catálogo esta nueva caja de ritmos que nos permitirá crear un tema de 0 a 100 por sí misma.
¡Muy buenas cavernícolas! Como ya sabéis nos encanta el mundo de la tecnología y siempre que podemos os traemos algo nuevo. Hoy os traemos a la cueva la nueva caja de ritmos autónoma de Roland. Hemos estado echándole un vistazo y sin duda teníamos que compartirla con vosotros. ¡Vamos a ello!
Pues bien, como ya hemos dicho antes, este Roland Verselab MV-1 es un dispositivo todo en uno. Para los que aún no conozcáis el formato, es bastante simple. Estos dispositivos funcionan por sí solos sin tener que ser conectados a otros, como podría ser un pc en la mayoría de los casos. Aún así, el Roland Verselab MV-1 presenta una buena compatibilidad hacia otros dispositivos, así como con Roland Cloud o Zenbeats.
Este dispositivo se basada en la tecnología Zen-Core, usada en muchos de los otros sintetizadores y productos estrella de Roland. Gracias a ésta, la calidad de sonido está asegurada. Las cajas de ritmos de Roland y sus sonidos han contribuido al desarrollo de la música a lo largo de los años. Desde el sonido acid del TB-303 hasta los clásicos samples del TR-808, pasando por otros muchos. Más de 3.000 sonidos vienen ya incluidos en el Verselab, siendo estas librerías ampliables a posteriori.
Pasamos al layout y nos topamos con un jaleo de pads, knobs, botones y diversos controles. Entre ellos, una matriz 4×4 de pads y un secuenciador por pasos TR-REC de las míticas cajas de ritmo Roland. Estos controles nos permitirán reproducir distintos sonidos, organizar arreglos e incluso sintetizar nuestras propias líneas de bajo y melodías. Podríamos entrar en más detalles sobre el funcionamiento, pero no sería justo sin haber tenido el Verselab en nuestras manos.
Otro apartado a destacar es el de la grabación. Los que sois artistas bien sabréis que la inspiración llega cuando menos te lo esperas, y es por eso que Roland ha incluido un micro integrado en el Verselab. Por supuesto que cuando queramos mayor calidad podremos hacer uso de la entrada XLR para grabar nuestras voces y algunos de los efectos integrados como Auto-Pitch, Harmonizer, Doubler y más. Podremos tomar hasta 16 tomas distintas, superponerlas unas con otras y situarlas en cualquier punto de nuestra producción. ¡Tu creatividad pone el límite!
Por último hablemos sobre la conectividad. El Verselab se alimenta a través de un USB tipo B, aunque también se suma a la moda de incluir una batería. Incluye una entrada de micro y micro XLR con alimentación phantom para micros de condensador. También contamos con entrada/salida estéreo de 1/4”, dos conectores –jack estéreo de 3,5 y 6,35mm– para auriculares y entrada/salida MIDI.
¿Qué os parece el Roland Verselab MV-1, cavernícolas? En la cueva siempre nos fascinan este tipo de dispositivos que, con un tamaño y peso reducidos –35,4×20,8x60cm y 1,2kg– permitan crear música sin ningún añadido. Os dejamos por aquí un video del Verselab en acción y el resto de especificaciones técnicas para los más curiosos. Como siempre, os esperamos en nuestras redes sociales para conocer vuestra opinión al respecto y debatir sobre ella. ¡Hasta la próxima!