La productora británica SOPHIE ha logrado hacerse hueco en el batallado mundo de la electrónica gracias a unas sorprendentes producciones que derrochan originalidad, y lo más importante, siendo fiel a sus principios.

Largo ha sido el camino que ha tenido que recorrer la productora SOPHIE, perteneciente al colectivo de electrónica PC Music, hasta que ha podido lanzar un álbum en el que se ha podido sentir cómoda y mostrarse tal y como es sin trampa ni cartón. La productora británica dejó unos años dejó boquiabierto a todos los que escucharon su primer EP, “SOPHIE”, en el cual mostró al mundo una gama de sonidos hasta entonces inexplorados por nadie: extravagantes, fuertes, enérgicos, bailables y ricos en variedad. Aunque el estilo de la británica tenía alguna analogía con sus compañeros de colectivo Danny L Harle, AG Cook o Hannah Diamond, el talento de SOPHIE en ser única se notaba a la legua. Ello le ha llevado a que en los últimos años haya producido temas para artistas de la talla de Charli XCX, Let’s Eat Grandma o Vince Staples (tema co-producido junto a Flume), colocándose como una de las productoras con más potencial de la actualidad.

Por otro lado, la productora lo ha tenido difícil para mostrarse al mundo hasta que ha comenzado a promocionar este álbum, “OIL OF EVERY PEARL’S UN-INSIDES”, debido a su identidad transgénero. Es por esto por lo que tuvo tanto impacto su primer single y tema del LP, “It’s Okay To Cry”, en cuyo videoclip aparecía un primer plano de la artista revelando finalmente su persona con confianza y atrevimiento. También es justo decir que es un mal tema escogido como primer adelanto, y no porque este sea malo, sino porque no es el mejor ejemplo de la línea que sigue el disco. Mientras que “It’s Okay To Cry” podría definirse como un tema que se acerca más a un pop electrónico o synth pop y que no acaba de romper hasta los 20 o 30 segundos finales, es en el resto del largo donde se puede apreciar toda la esencia de SOPHIE y los recursos que la hacen única en su especie.

Sus dos siguientes tracks, muy afines entre sí, son “Ponyboy” y “Faceshopping”, los cuales consiguen de manera sinérgica elevar la energía por todo lo alto después de que esta comenzara a aumentar al final del primer tema. La primera de la pareja comienza muy agresivamente, con diversos golpes de una fuerte percusión que se abalanzan de una manera coherente dentro del aparente caos que se crea entre estos y las voces monstruosas y agudas que se van alternando con la de la artista. En “Faceshopping”, como hemos mencionado, el estilo es muy parecido al anterior, con potentes sonidos de una naturaleza más metálica y una sarcástica crítica a los estándares de belleza “fotoshoppeados” de hoy en día (“My face is the front of shop / My face is the real shop front”).

A continuación está “Is It Cold In The Water”, uno de los temas mejor conseguidos de todo “OIL OF EVERY PEARL’S UN-INSIDES”, en el cual una melodía sintética y pseudo-alienígena va ganando y perdiendo fuerza a medida que avanza la canción. Esta da apoyo a una SOPHIE que se ve desesperada y al borde de la locura, acabando por crear un ambiente dramático y épico muy bien logrado. En “Infatuation”, la productora opta por un tema más progresivo en complejidad, con un comienzo tímido y con pocos elementos al cual poco a poco va incluyendo voces, melodías y sonidos artificiales para llegar a unos últimos segundos chirriantes que acaban por relajarse de nuevo para terminar de una manera similar al comienzo.

“Not Okay” es un track que aunque es corto da bastante de sí, con distintas dinámicas que se solapan unas sobre otras para truncarse al final (signo de que el tema podía haberlo desarrollado más) y llevarnos a “Pretending”, un tema ambiental que al contrario que el anterior se alarga demasiado, unos casi 6 minutos para ser más precisos, aunque la espera merece la pena para llegar a los mejores temas de todo el LP. “Immaterial” es el primero de ellos, en el cual SOPHIE saca todo su arsenal de baile a relucir para darnos un chute de adrenalina después de haber estado calmados un par de temas, con un ritmo seco y fuerte el cual es difícil que no se te pegue desde el comienzo. Dentro del track además se incluye una especie de interludio en el que la artista canta deformando su voz.

Y para terminar está la otra gran joya, “Whole New World/Pretend World” una canción de 9 minutos que acaba por dejarte exhausto aunque tremendamente sorprendido, y es que la productora ha sabido incorporar una innumerable cantidad de elementos para que a lo largo de todo el tema no te aburras. A la vez, todos ellos gozan de una gran potencia, de modo que sin darte cuenta, SOPHIE descarga en el oyente una cantidad ingente de energía al final de un álbum que ya había dado bastante de si, y las sensaciones que te quedan al final son bastante parecidas a las de haber hecho deporte durante un buen rato, agotados pero satisfechos. No cabe duda de que nos encontramos ante un gran trabajo en el cual la británica ha sabido mantener la esencia que ya presentó hace unos años explotando sus recursos a la enésima potencia. Ya puedes escuchar a continuación “OIL OF EVERY PEARL’S UN-INSIDES”, el álbum debut de SOPHIE