La catalana protagonizó el penúltimo concierto de Las Noches de Río Babel en el estadio Wanda Metropolitano, donde nos brindó un show difícil de igualar.
A estas alturas la artista de Barcelona Bad Gyal no necesita ninguna presentación. Su trabajo y esfuerzo junto con su sonido único en el país le ha llevado a donde está hoy, llenando estadios por toda España y ganando cada vez más relevancia al otro lado del charco. Mientras se encamina hacia su álbum debut, Bad Gyal nos dejó hace unos meses su EP “Warm Up”, que ahora pone a bailar por primera vez a sus fans con la vuelta de los conciertos.
El programa de Las Noches de Río Babel, organizado por el festival Río Babel, fue el encargado de acoger a Bad Gyal en Madrid. Esta serie de conciertos celebrados en el estadio del Atlético de Madrid, el Wanda Metropolitano, poseen un gran aforo gracias a la grada sur. Aforo que aprovecharon los fans de la catalana para llenar al máximo; un ambiente inmejorable para recibir a “la reina”.
Si hay algo en especial que Bad Gyal cuida en su carrera son sus shows; desde el outfit hasta la puesta en escena, todo está pensado para la espectacularidad. Lo primero digno de mencionar fue la épica presentación de la artista. Con su equipo de bailarinas portando coloridas banderas caribeñas a lo militar, se anunciaba la llegada de la queen of queens junto a una frenética música. Los gritos advirtieron su presencia en lo alto del escenario y sin más dilación sonó “Pussy”.
A partir de aquí Bad Gyal y sus bailarinas no dieron un respiro al espectáculo, así como el apartado visual y de luces que no decepcionó en absoluto. Y esto no es algo como para obviar o pasar por alto, puesto que no existen tantos artistas que canten y bailen al mismo tiempo, con coreografías ensayadas al milímetro y una autoexigencia tan grande a la hora de saltar al escenario.
En cuanto a las canciones, tanto fans de los comienzos como otros más actuales pudieron disfrutar de su repertorio. Difícil se hacía contener las ganas de bailar en los asientos con temas como “Blink” o uno de sus primeros hits, “Mercadona”. Grandes momentos se vivieron también con “Yo Sigo Iual”, tema en catalán que dedicó a su familia que estaba allí viéndola. También con “Hookah”, para la que sacó literalmente una hookah al escenario de la que fumó junto a sus bailarinas.
También hubo cabida para los unreleased que tanto desean los fans de Bad Gyal. “Slim Thick”, “Gramos” y “Toto” sonaron en el estadio, y no había asistente que no se las supiera a pesar de no estar lanzadas de manera oficial. La recta final del concierto estuvo plagada de éxitos de la artista; “44”, “Zorra”, “Alocao”… Después de esto se despidió del público, pero todos sabían que había una cuenta pendiente que no iba a dejar sin resolver. Las banderas volvieron a ondear con “Internationally”, hubo momento para el rezo con “Santa María” y el colofón obviamente lo puso “Fiebre”. Tres clásicos que pusieron el broche a una estupenda actuación.
Visto lo visto, será muy complicado que alguien salga de una actuación de Bad Gyal decepcionado. Esta artista lo hace como una superestrella y aún tiene recorrido por delante para impresionar cada vez más.