El artista cubano publica su cuarto álbum -tercero en solitario- en tan solo dos años, en el que se asienta en la escena latina.
Ovi está siendo una de las sensaciones de la escena urbana latina últimamente, y no es casualidad. Este artista cubano ha conseguido girar las cabezas de todo el mundo hacia él en menos de tres años, llegando a compartir micrófono con artistas realmente consolidados y prestigiosos como Arcangel, Zion y Lennox o incluso Snoop Dogg.
En su nuevo proyecto “Retumban2” nos deja muy claro cuál es su estilo y cómo le gusta trabajar, siempre entre el trap y la música autóctona mexicana (que Natanael Cano y él han incorporado casi como pioneros a su música). Además, abundantemente rodeado de colaboradores, ya que en ninguno de los 14 temas viene sólo.
Por eso prácticamente todos los temas de trap de este álbum, que son muchos, llevan incorporados esa guitarra tan característica en el beat para darle el toque chicano. Esto es a lo que Ovi llama “trap tumbado”. El tema “Malos Ratos” junto a Omy de Oro es un claro ejemplo de esto. Tanto el beat como la cadencia con la que canta Ovi en la intro nos recuerdan al país centroamericano.
Hay muchos más ejemplos de esto en el álbum, de hecho la mayoría de temas siguen esta línea llegando a ser incluso algo repetitivo. “Soy Un Bandido” con Miky Woodz nos deja una buena nueva cara del colaborador y “Dame La Lulu” con Eladio Carrion, Natanael Cano y Badguychapo nos deja este trap tumbado muy marcado.
También con esta inseparable guitarra pero en un trap más comercial tenemos uno de los mejores cortes del álbum, “Las Leyendas Nunca Mueren” con Myke Towers, Ñengo Flow y el mexicano Aleman. En este tema todos los artistas implicados destacan con sus barras, aspecto en el que por cierto Ovi demuestra tener mucho dominio.
El único corte del álbum en el que escuchamos reggaeton se llama “Se Acabó” y viene de la mano de Zion y Lennox. Es cierto que con un reggaeton bastante “light”, pero disfrutable igualmente. En otro tipo de ritmos también viene “Drill Tumbado” con Jon Z y el nuevo fenómeno del drill neoyorquino CJ. El problema es el mismo del que hablamos en la review del nuevo EP de CJ: una vez más han intentado volver a hacer el hit “Whoopty”, esta vez en versión latina.
No podía faltar uno de los ya consagrados ‘corridos tumbados’ de Ovi, Natanael Cano, y Junior H, en este caso también con ayuda del grupo Herencia de Patrones y llamado “Los 4 Ases”. En este tema hablan de “su negocio de narcotráfico”, suponemos que de forma ficticia, con esa variación al clásico corrido mexicano que han hecho suya.
Cerrando el álbum nos hemos encontrado con dos extrañas sorpresas. En el penúltimo tema, “Entre Nosotros” junto a Mariah Angeliq, las voces se escuchan notablemente bajas respecto la beat. Y en el último, “Para Todos Mis Paisanos” en colaboración con La Máxima Banda de Mazatlan Sinaloa, también escuchamos una descompensación grande de volúmenes, esta vez demasiado altos. Un par de despistes que ensucian un poco la resolución de este álbum.
Toda una declaración de intenciones de Ovi este álbum, que pide un hueco en lo más alto de la escena urbana latina. Probablemente no sea de los favoritos de nuestro año, pero no podemos negar que Ovi y el Rancho Humilde han traído toda una nueva ola de sonido a la escena.
