Los ingleses The 1975 ofrecen en su último disco “Notes On A Conditional Form” un manifiesto de madurez y versatilidad que expanden con cada nuevo trabajo
El cuarteto de Manchester The 1975 ya no es lo que era. Espera, no seas presuntuoso. Aunque esta sea una frase que de manera estándar referenciaría un cambio hacia la demacración o la caducidad, esta vez el significado que le queremos dar es contrario. Lo que comenzó como una típica banda de alt-rock británico con un público meramente adolescente, se ha ido expandiéndose y evolucionando hasta el punto en el que estamos ahora. Su último largo “Notes On A Conditional Form” representa la segunda parte de su era “Music For Cars”, la cual comenzó a finales de 2018 con su último “A Brief Inquiry Into Online Relationships”, y este es su producto más maduro hasta la fecha: el reflejo de una banda que, después de todo el trote que lleva a sus espaldas, ya puede ser consagrada como una de las más indispensables de nuestra era.
“Notes On A Conditional Form”, cuyo lanzamiento al igual que su tour fue pospuesto, ha sido escrita durante su gira del pasado año y grabada, de manera paralela, en hasta 16 estudios de los diferentes continentes de todo el mundo. Puede que el estar expuestos a todos estos ambientes y su identidad en ese momento de nómadas haya sido la causa de que este LP sea también el más ecléctico de The 1975 hasta la fecha. O puede que simplemente sea porque son una banda multifacética que con cada disco que avanzan parecen tomarse la versatilidad como una obligación mayor. Así, a medida que avanzan las canciones, uno llega a perder la cuenta del número de estilos con los que el grupo llega a hacer malabares al final de sus 22 cortes.
Aunque el disco contiene varias colaboraciones no acreditadas como la de la experimental FKA twigs, la joven cantautora Phoebe Bridgers o el DJ jamaicano de reggae Cutty Ranks, probablemente sea la de su opener “The 1975” la que más sorprenda. En esta intro, el grupo invita a la activista Greta Thumberg para emitir un poderoso comunicado que embiste contra el cambio climático y todo lo que lo propulsa ambientada por una base simple y vibrante. Y siguiendo la línea de protesta, el adelanto “People” sirve a la banda como manifiesto sobre la sociedad en distintos aspectos en los que la considera condenada. Esto lo hacen con un look rebelde ambientado por un punk rock de guitarras chirriantes y vocales desgarrados.
Parece haber un notable punto y aparte a nivel lírico y musical entre las dos canciones mencionadas y las 20 restantes de este proyecto. A partir del cálido interludio “The End (Music For Cars)”, todos los cortes parecen pertenecer a una misma maquinaria pero que luce piezas de muy diferentes materiales. Puede que si se mantenga esa actitud contemplativa, pero sin duda se hace desde un punto de vista más introspectivo en el que podemos escuchar a Healy cantar sobre el amor, la fama o la amistad.
Anteriormente hemos visto cómo The 1975 nos sorprendía con alguna canción exquisitamente producida y que buscaba identificarse como electrónica. Sin embargo, es en este álbum en el que la banda termina de asentar las grandes capacidades de producción de Matty y George Daniel con tracks como “Frail State Of Mind”, “Yeah I Know”, “I Think There’s Something You Shold Know”, “Shiny Collarbone” o “Having No Head”. En estos parece haber una cierta tendencia común del garage house, pero no sería más que la punta del iceberg si quisiéramos hablar una a una de ellas. Con mencionadas influencias como la de Burial, estas canciones podrían dar el pego de haber sido producto de compatriotas como Four Tet o Caribou, artífices experimentados de bases ligeras pero contundentes y un gran abanico de sonidos sintéticos como los que contienen estos tracks.
Por otra parte, en “Notes On A Conditional Form” encontramos varias canciones en las que la banda desenchufa todo lo posible para embriagarnos con un sensible folk como ocurre en “Jesus Christ 2005 God Bless America” o “Playing On My Mind”, mientras que en temas como “Then Because She Goes”, “Me & You Together Song” o la magnífica oda a la amistad “Guys” encontramos una instrumentación mucho más aireada y acondicionada para esperanzar.
La experimentación con samples y voces modificadas ha sido una de las marcas de identidad de The 1975 desde sus inicios, y este sigue siendo un elemento pedal para la banda que permanece a día de hoy, más notable en tracks como “Nothing Revealed/Everything Denied”, en la cual complementa al resto de voces góspel, la influida por el R&B apianado “Tonight (I Wish I Was Your Boy)” o la electrizante “What Should I Say”. Además, tampoco abandonan el synth pop ochentero que siempre les ha acompañado que contiene temas míticos como “The Sound”, que esta vez se materializa por ejemplo en “If You’re Too Shy (Let Me Know)”.
Ya puedes escuchar al completo a continuación “Notes On A Conditional Form”, el nuevo álbum de The 1975 que pone un nuevo techo a la banda inglesa:
