Snavs inicia este año con diez remezclas oficiales de “Opal”, su último álbum. ¡Bass music y jóvenes promesas por doquier!
Snavs ha sido sin duda uno de los productores más activos del panorama bass a lo largo del 2020. Tiene muy claro cuál es su camino y con cada lanzamiento sigue demostrando que, lo de producir música, se le da bastante bien. Por un lado tiene su propio sello discográfico, Riotville Records, con el que intenta apoyar a la escena electrónica danesa. Por otro, sus lanzamientos son cada vez más sólidos, prueba de ello su álbum “Opal”.
Con respecto a los artistas que han trabajado a lo largo de las diversas remezclas no encontraréis a ningún top ventas. Tampoco estamos ante productores desconocidos, pero si es cierto que en general no hablamos de un álbum de remixes compuesto por artistas de renombre. Cómo hemos comentado previamente, Snavs apoya con creces el talento musical de jóvenes artistas que aún no han logrado dar el salto a la esperada fama. El danés quiere aportar lo que tanto echó en falta durante sus primeros años de carrera, aunque a él precisamente no le ha ido nada mal.
Entrando en materia con las diversas remezclas que componen este trabajo, aquí domina el bass music. De hecho la mayor parte de los cortes son contundentes y oscuros. Sólo un par de ellos nos permiten disfrutar de la vertiente más melódica de “Opal”, aunque no precisamente desde una perspectiva pausada. Diez versiones que conectan con los diez cortes originales. No se repite ningún track, encontramos una remezcla para cada pieza del álbum.
El trap está presente en tres de las diez remezclas. Los que seguís Snavs desde hace años sabréis que él siempre ha estado ligado a este género, por lo que encontrar cortes de esta vertiente no es precisamente una sorpresa. Tanto TYRAZ como Dabow & LYNY nos ofrecen dos versiones más que contundentes en los que los sonidos agudos protagonizan los drops. Para cerrar el círculo de este estilo tenemos a UNKWM, del cual quizás esperábamos algo más. Nos ofrece dos builds ups sencillamente bestiales que nos envuelven por completo para rematar en dos drops pobres de un trap que quizás ya cansa a estas alturas. Como siempre, cuestión de gustos.
Se salen de los esquemas generales dos remixes bastante diferentes. En primer lugar, Kage nos trae un VIP de “Trippy” en forma de bass house, pero ni muchos menos en su registro más convencional… Una demostración de que a veces no son necesarios excesivos elementos para dotar a un corte de todo lo que este necesita. Oscuridad en estado puro.
Por otro lado Kazu abandona el bass para traernos un remix más que interesante de electro a “Cellar”. Hoy en día este estilo por desgracia está ciertamente abandonado, aunque Kazu se encarga de recordarnos cuánto merece la pena. Más variedad para este compendio de remezclas que sin duda enriquece su conjunto. Si bien la original ya era una pieza ciertamente peculiar, el productor le otorga un toque más de energía y ambiente, el cual aleja al track del underground para acercarlo de una forma bastante elegante al mainstream.
Continuando con la amalgama de géneros musicales dentro del bass music, entra en escena el dubstep. En primer lugar y cómo no, preparaos para entrar en un estado de locura del que difícilmente saldréis ilesos. Tanto Makla como Foramic compiten en sus diversos remixes por el trofeo de mejor tema riddim de todo el compendio. Ambos artistas han logrado llevar sendas piezas originales a un nivel de caos y oscuridad que difícilmente podíamos imaginar. En la música nada está escrito, por suerte.
Snavs tampoco puede olvidar de donde viene, y es que gran parte de su carrera ha estado protagonizada por sus registros más melódicos. En efecto, estos sonidos también tiene cabida en este conjunto. Heuse nos ofrece una apuesta más que interesante, desarrollando la pieza lentamente y dando protagonismo a la vocalista, hecho que aún no habíamos experimentado en todo el álbum de remezclas. El artista nos trae un precioso track de melodic dubstep que no tiene pérdida, pero hay un problema… Un compañero le hace sombra.
NUU$HI reina por completo con uno de los mejores lanzamientos de la historia de Riotville Records. Fue todo un acierto por parte de Snavs el publicar este trabajo en diciembre, ya que el hype creado sobre el resto del álbum es bestial. Por desgracia, pocos cortes alcanzan el nivel de este trabajo. Sólo os podemos pedir que cerréis los ojos y disfrutéis del aluvión de melodías y sonidos cortados que protagonizan ambos drops. Una obra de arte.
Aunque claro, la narrativa de este compendio es aún mayor. Snavs también forma parte de las remezclas oficiales, con un VIP de “Less” que nos deja absolutamente anonadados. ¿Echabais de menos el drum n bass a lo largo de estos diez temas? Tranquilos, el dueño del cotarro ha llegado para quedarse y sorprendernos sobre un registro no muy habitual en su música. En efecto, otra de las grandes joyas de este compendio. “Less” era ciertamente un tema melódico, y aunque con el VIP con pierde ni mucho menos esa esencia, el track es llevado a una dimensión mayor. Contundencia y desparpajo en un VIP creado por y para la pista de baile. ¡Qué ganas de que podáis disfrutarlo en un festival!
Hasta aquí nuestra review de estas diez remezclas oficiales de “Opal”. Esperamos que hayáis disfrutado de cada una de las diez remezclas tanto como nosotros. Tanto Riotville Records como Snavs comienzan el 2021 por todo lo alto. ¡Veremos con qué nos sorprenden a lo largo de este esperado año!
